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jueves, 4 de septiembre de 2014

¿QUÉ ES EL MISTERIO DE LA PIEDAD?



“E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad:
Dios fue manifestado en carne, justificado en el Espíritu, visto de los ángeles, predicado a los gentiles, creído en el mundo, recibido arriba en Gloria”. 1ªTimoteo 3:16.

¿QUÉ ES MISTERIO?

Término procedente del vocabulario de los griegos. Algo secreto. En el N.T. éste término expresa acción o dispensación de Dios guardada en secreto hasta la hora precisa y determinada. Romanos 16:25-26.

PIEDAD

De un término hebreo GHAHSEED Piadoso o Santo. El misterio de la piedad también es conocido como la divinidad.
“E indiscutiblemente, grande es el misterio de la piedad: Dios fue manifestado en carne, justificado en el Espíritu, visto de los ángeles, predicado a los gentiles, creído en el mundo, recibido arriba en Gloria”. 1ªTimoteo 3:16.

El verbo (egéneto) en Juan 1:14 (la palabra fue hecha carne) la teología ficción dice que el verbo desapareció más concretamente dejo de ser, en la manifestación de Dios.

No tiene sentido afirmar que el logos dejó de ser lo que era, pues era y sigue siendo Dios (Juan 1:14). “Aquel verbo fue hecho carne”, él no dejó de ser lo que es, de otra manera hubiera desertado de ser Dios.

La interpretación y posición, no alterará su esencia natural, Dios no puede ser alterado ni por el tiempo, ni por sus manifestaciones, nada más que él tomó aquella representación particular.
Él se propuso a sí mismo hacer una función misteriosa sin que en ninguna manera se cambiara y se afectara su naturaleza original.

(Malaquías 3:6; Hebreos 13:8) además, la afirmación de que “el verbo fue hecho carne” la palabra sarx (carne) denota aquí naturaleza humana, que consiste en cuerpo y alma y espíritu.

Si la naturaleza humana de Cristo no se derivó del mismo linaje humano (Isaías 11:1), sino que únicamente se parecía al hombre, entonces no existe tal relación entre él y nosotros. Como la que se hacía necesaria paras ser que su mediación sea eficaz para nuestro bien. (Hebreos 2:14).

Por tal motivo decimos que Dios es el Mesías (En hebreo MASHIAJ) y el Mesías es el Señor Jesucristo anunciado en el A.T. y que necesariamente tenía que ser Dios mismo presente. (Isaías 52:6).

En la profecía:
·    Jesús es el Mesías.
·    Una virgen concebirá.
·    Descendiente de reyes.
·    Nacido de Belén.
·    Sobre sus ropas echaron suertes.
·    El Mesías es Dios.

Dios es Padre por causa primera de la existencia, de la vida, y supremacía que ejerce en virtud de lo que es en sí mismo. Isaías 35:4-6 y Mateo 11:5 nos muestran que el Mesías es Dios.

LA HUMANIDAD PERFECTA

Las Santas Escrituras presentan a Cristo no solamente en perfección natural, sino también moral e integridad, declarando la escritura así su impecabilidad.

Cristo Jesús fue hecho por nuestra causa pecado, no obstante estaba libre tanto de la depravación hereditaria como del pecado actual. Romanos 3:11 y 2ªCorintios 5:21.

Nunca hizo ÉL una confesión de error moral; ni se unió con sus discípulos a orar, diciendo: “perdónanos nuestros pecados”. Pudo desafiar a sus enemigos a que lo redarguyeran de pecado.

El único hombre ideal (perfecto). Hebreos 2:9; 1°Corintios 15:45; 2°Corintios 3:18; Filipenses 3:21.

LA NECESIDAD DE SU HUMANIDAD

Puesto que el hombre pecó, era necesario que el castigo lo recibiera el hombre. Además, la paga del castigo envolvía el sufrimiento del cuerpo y del alma, en tal forma que solo el hombre es capaz de sufrirlo. Juan 12:27; Hechos 3:18; Hebreos 2:14; 9:22.

Las profecías hablaron de su humanidad:
·    Su nacimiento.
·    Su muerte.
·    Se cansó.
·    Tuvo hambre.
·    Tuvo sed.
·    Durmió.
·    Lloró.
·    Creció en estatura.

LA NECESIDAD DE SU NATURALEZA DIVINA

En el plan de salvación era absolutamente esencial que el MEDIADOR fuera la Manifestación del Verdadero Dios. Esto era necesario, para que:
a)  Presentara un sacrificio de infinito valor y diera perfecta obediencia a la Ley de Dios pronunciada por los patriarcas y profetas.
b) Soportara la ira de Dios con propósito redentor, es decir, para liberar a otros de la maldición de la ley.
c)  La necesidad de uno en capacidad de aplicar los frutos su trabajo cumplido a aquellos que lo habrías de recibir mediante la fe.

El hombre con su vida deshecha no puede pagar el castigo del pecado que demanda la justicia Divina, ni prestar obediencia perfecta a Dios.

EL VERBO HECHO CARNE

Esta se efectuó por medio de la concepción sobrenatural y un nacimiento natural. Más de 750 años antes del nacimiento de Jesús el profeta Isaías profetizó: “He aquí una virgen concebirá y dará a luz un hijo y se llamará su nombre Emanuel”.

En su humanidad ÉL fue hijo que nació y el hijo que nos fue dado.
En su deidad ÉL era Dios Fuerte y Padre Eterno.

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